Sumario: | Los delitos de lesa humanidad cometidos por el tándem cívico-militar produjeron la matanza de las víctimas y el control de la sociedad con el engaño y el terror. También, el dominio de los cuerpos de los excluidos sometidos a condiciones de existencia que llevan inexorablemente a su destrucción. El genocidio se sostuvo con la acción de los golpistas de 1976 y después con el gobierno de Carlos Menem, la “cría del Proceso”, que completó los objetivos, produciendo bajo la democracia una aguda exclusión social que aun se mantiene. Aquí se demuestra que se perpetró genocidio con las armas y con el manejo de la economía, de lo que dan testimonio los desaparecidos y los excluidos sociales. A través de los documentos compilados queda al desnudo la deliberada intención de exterminar a todos aquellos que pudieran oponerse a sus designios.
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